Generalidades

Los músculos son los órganos encargados de movilizar la estructura formada por los huesos y las articulaciones.

Si bien existen músculos en las paredes viscerales (músculos lisos involuntarios) y en el corazón formando el miocardio, sólo nos interesan en este capítulo los músculos esqueléticos, integrantes del aparato locomotor.

Estructura de los músculos esqueléticos

Presentan a nuestra consideración dos formas básicas

a) músculos largos en forma de huso, como el bíceps;

b) músculos anchos, de amplia superficie, como el diafragma

Los músculos largos son los más característicos. Presen­tan dos extremos terminales de color blanco nacarado lla­mados tendones, mediante los cuales se insertan en los huesos, y una parte media, ensanchada y roja, llamada vientre, que es la encargada de producir el movimiento.

La sección transversal del vientre del músculo muestra fascículos de .diverso grosor envueltos por fibras de tejido conjuntivo en cuyo interior se disponen los vasos que irri­gan al músculo y los nervios que lo inervan.

Las fibras musculares son las células integrantes del te­jido muscular estriado, que funcionalmente se caracteriza por su rápida contractibilidad voluntaria. Estructuralmente, una fibra muscular estriada se presenta como un elemento fusiforme con varios núcleos en su interior y se reconoce fácilmente por la presencia de estrías que se disponen en forma transversal al sentido de la fibra

Propiedades de los músculos

La capacidad de producir movimiento, que caracteriza a los músculos, se debe a las tres propiedades del tejido que los constituye.

Estas propiedades son: excitabilidad, contractibilidad y elasticidad.

La excitabilidad es la propiedad por la cual la fibra mus­cular es sensible al estímulo nervioso natural o a otros estímulos artificiales, como la acción de la electricidad o ciertos estímulos químicos.

La contractibilidad es la propiedad mediante la cual el músculo responde al estímulo recibido contrayéndose. Cuando el músculo se contrae se acorta y engruesa, cam­biando de forma sin variar su volumen.

La elasticidad permite al músculo recobrar su forma ori­ginal cuando se interrumpe el estímulo que provoca su contracción.

Fisiología muscular

E trabajo de los músculos requiere una gran cantidad de energía que se obtiene consumiendo una elevada cantidad de glucosa y oxígeno-Normalmente, los músculos en estado de reposo se pre­sentan relajados. Sin embargo, la relajación no es total puesto que los músculos se encuentran en un estado de semicontracción permanente.

Dicho estado de semicontracción constituye el tono mus­cular que facilita la contracción inmediata del músculo al recibir el estímulo.

En general y debido a que los músculos se disponen en grupos de acción antagónica, el mantenimiento del tono muscular es un factor importante en la conservación de la posición corporal.

Del mismo modo podemos afirmar que cuando un grupo muscular se contrae para producir movimiento, el grupo antagónico a él se relaja.

El trabajo muscular excesivo puede llegar a producir la intoxicación del músculo provocando la fatiga muscular.

La fatiga muscular es el fenómeno que consiste en la pérdida momentánea de las propiedades del músculo a causa de la acumulación de ácido láctico producido en él.

El ácido láctico es un producto de desecho resultante de la oxidación de la glucosa que normalmente el músculo elimina en la sangre.

Cuando el trabajo es excesivo, la producción de ácido láctico es mayor y la capacidad de la sangre para eva­cuarlo es insuficiente; por ello el ácido se acumula con los efectos mencionados.

El grado máximo de fatiga muscular constituye el calam­bre. En él, el músculo fatigado queda contraído y no obe­dece a los estímulos hasta que, pasado cierto tiempo, la sangre evacúa el exceso de ácido láctico acumulado.

Principales grupos musculares

Los anatomistas reconocen en el cuerpo humano alrede­dor de 600 músculos.

Salvo raras excepciones, la acción muscular es grupal y no individual, por lo que resulta conveniente analizar los grupos musculares y no cada músculo en forma aislada.

A continuación analizaremos sintéticamente la acción de los principales, grupos musculares:





sábado, 19 de junio de 2010

Músculos de la cara: mímica y masticadores



Músculos de la cara


Son músculos anchos que se caracterizan por presentar una inserción en los huesos y otra en la piel. Sus movimien­tos determinan las expresiones faciales por lo que, con razón, se los llama "músculos de la mímica”



Músculos masticadores


Son los músculos responsables de la movilidad del maxi­lar inferior imprescindible para la trituración de los alimen­tos. Estos músculos se insertan por arriba en los huesos del cráneo y por debajo en la mandíbula.